Madrid
tal vez no puede competir con algunas delas principales capitales
europeas, no es un museo al aire libre como Roma, su urbanismo es un
pálido reflejo de París, no crea tendencias como Londres y ni tan
siquiera tiene una catedral gótica como la de la mayoría de capitales de
provincia.
Edificio de viviendas en el centro de Madrid |
Cuenta
con una buena red de transporte público y conexiones en tren
y autobús con otros interesantes municipios en los que hacer excursiones de
un día: Alcalá de Henares, Aranjuez, Chinchón, El Escorial, Segovia,
Ávila…
¿Qué ver?: Para comenzar esta ruta por la ciudad, he pensado en el monumento más imprevisible que podemos encontrar en Madrid, el templo de Debod, un auténtico santuario egipcio situado en el parque del Cuartel de la Montaña.
Desde allí podemos dirigirnos al cercano Palacio Real (siglo XVIII), cuyas estancias se adaptaron sobriamente a los gustos de cada época (salones del Trono y de las Columnas, comedor de Gala, el salón de Alabarderos, la salita Gasparini, la Capilla Real, el Gabinete de Maderas Finas…). Las zonas más curiosas son la Real Farmacia, que se conservó en perfecto estado, y la Real Armería, por su importante colección de armaduras. La visita se puede ampliar recorriendo la Galería de Pintura, alcobas y salones palaciegos decorados con obras desde el siglo XV hasta principios del XX (pintura flamenca, escuelas italianas y españolas). Enfrente del patio de armas del Palacio Real se encuentra la catedral de la Almudena, de reciente construcción.
Desde allí podemos dirigirnos al cercano Palacio Real (siglo XVIII), cuyas estancias se adaptaron sobriamente a los gustos de cada época (salones del Trono y de las Columnas, comedor de Gala, el salón de Alabarderos, la salita Gasparini, la Capilla Real, el Gabinete de Maderas Finas…). Las zonas más curiosas son la Real Farmacia, que se conservó en perfecto estado, y la Real Armería, por su importante colección de armaduras. La visita se puede ampliar recorriendo la Galería de Pintura, alcobas y salones palaciegos decorados con obras desde el siglo XV hasta principios del XX (pintura flamenca, escuelas italianas y españolas). Enfrente del patio de armas del Palacio Real se encuentra la catedral de la Almudena, de reciente construcción.
Siguiendo nuestro camino llegamos a la plaza del Sol, presidida por la casa de Correos (del siglo XVIII y estilo neoclásico, actualmente sede de Presidencia de la Comunidad de Madrid), con su reloj que el 31 de diciembre anuncian el nuevo año y, en el suelo, la inscripción del kilómetro cero del sistema radial de carreteras.
La calle de Alcalá nos lleva a la plaza de Cibeles, con la famosa fuente del mismo nombre, flanqueada por el palacio de Buenavista (Cuartel General del Ejército, antes residencia de los duques de Alba), el palacio de Linares (Casa de América), el Banco de España (finales del siglo XIX) y el palacio de Cibeles o de Comunicaciones
(inicios del XX, antes sede de Correos y hoy del Ayuntamiento de
Madrid). Muy cerca también encontramos un buen ejemplo de palacio
residencial, la casa de las Siete Chimeneas (siglo XVI, hoy Ministerio de Educación, Cultura y Deportes).
Desde Cibeles ya se ve la puerta de Alcalá, y al llegar a ella podemos entrar al parque del Retiro, inmensos jardines de un palacio real desaparecido del que sólo se conservan el casón del Buen Retiro, el Salón de Reinos (hoy Museo del Ejército) y diferentes estanques. Intervenciones posteriores añadieron nuevas edificaciones como la Real Fábrica de Porcelana, el Observatorio Astronómico, construcciones de recreo (casas del pescador, del contrabandista y la montaña artificial), el palacio de Cristal del Retiro, el palacio de Velázquez, fuentes (de los Galápagos y de la Alcachofa, del Ángel Caído), la rosaleda y el lago artificial.
Entrada al Museo del Prado |
La Estación de tren de Atocha |
Monumento a García Lorca |
Los domingos y festivos, por la mañana, el barrio de Lavapiés se convierte en el Rastro, un inmenso mercado al aire libre en el que se puede encontrar desde antigüedades hasta las últimas novedades.
Jardin vertical junto al Caixa Forum |
Diseminados por Madrid, todavía podemos disfrutar de más ofertas culturales: el Teatro Real, el Auditorio Nacional de Música, el Centro Cultural Conde Duque (antiguos cuarteles militares del siglo XVIII), el Museo de América (colecciones precolombinas, arte colonial y etnografía), el Museo Cerralbo (obras de el Greco, Tintoretto y Zurbarán), el monasterio de las Descalzas Reales (antiguo palacio renacentista que contiene pinturas de Tiziano, Rubens y Zurbarán), el Matadero de Madrid (destinado a diversas disciplinas, desde el teatro y la danza al diseño y la moda), el Centro de Exposiciones Arte Canal (en los antiguos depósitos de agua), el Museo de Historia de Madrid, la casa Museo de Lope de Vega, el Museo del Traje, el Museo del Romanticismo, el Museo Geominero… sin olvidar las exposiciones temporales y colecciones permanentes de galerías y fundaciones, y una variada propuesta teatral.
Una forma descansada de ver la Casa de Campo, y algunas interesantes vistas de la ciudad, es utilizar el Teleférico de Madrid. En Semana Santa y verano el Parque de Atracciones de la Casa de Campo abre sus puertas.
Lo más friki y/o kitsch: Los madrileños han elevado los embutidos a la categoría de obra de arte, y tal vez por eso encontramos tantos Museos del Jamón.
Las leyendas urbanas dicen que es una de las pocas ciudades del mundo, por no decir la única, que dedica una escultura a Lucifer. Aunque parecer ser que esa no era la intención de los promotores de la fuente del Ángel Caído en el Retiro, la creencia popular se escuda en que está situada a una altitud de 666 metros sobre el nivel del mar.
¿Dónde comer?: El mejor consejo es entrar en algún lugar al que vayan a comer o tapear los madrileños y evitar los sitios llenos de turistas. Por la inmigración recibida de toda España, en Madrid podemos encontrar especialidades gastronómicas de la mayoría de lugares, incluido algunos lugares con el delicioso bocadillo de calamares. La Mallorquina, en la esquina de calle Mayor con Plaza del Sol, tiene una repostería buenísima.